La Panadería Mor Centro es un establecimiento emblemático de Teruel, ubicado en la C. de Joaquín Costa, 27, 44001. Con una larga trayectoria en el sector, se ha consolidado como un referente en la zona gracias a la calidad y variedad de sus productos.
Con una pastelería que deleita a los paladares más exigentes, esta panadería se distingue por ofrecer una amplia selección de dulces y repostería recién horneada. Desde deliciosos cruasanes hasta exquisitos pasteles, en Panadería Mor Centro encontrarás el toque dulce perfecto para cualquier ocasión.
Además de su exquisita pastelería, este establecimiento también ofrece una variada selección de productos de tienda alimentación, ideales para abastecer tu despensa con lo mejor en productos frescos y de calidad. Desde pan recién horneado hasta embutidos selectos, en Panadería Mor Centro encontrarás todo lo que necesitas para tus comidas diarias.
Los clientes que han visitado la Panadería Mor Centro han destacado la calidad de sus productos, otorgándole una valoración de 3,3 sobre 5. Entre las reseñas, se puede leer comentarios como ayer a las 7:45 de la tarde entré a comprar tres botes de miel y me dijeron que estaban cerrando y no me los quisieron vender, una pena como se nota que no era la dueña, sino una empleada la que había ahí. A pesar de comentarios aislados, la mayoría de los clientes destacan la calidad y variedad de los productos ofrecidos.
Si buscas un lugar donde disfrutar de deliciosos dulces y productos de tienda alimentación de primera calidad, no dudes en visitar la Panadería Mor Centro en Teruel. Su teléfono de contacto es 978 60 53 86, donde podrás realizar consultas o encargar tus productos favoritos.
Déjate cautivar por el aroma a pan recién horneado y déjate tentar por los exquisitos dulces de la Panadería Mor Centro. Un lugar donde la tradición y la calidad se unen para ofrecerte una experiencia gastronómica única en Teruel. ¡Te esperamos!
Jose dejo este comentario sobre Panadería Mor Centro:
ayer a las 7:45 de la tarde entré a comprar tres botes de miel y me dijeron que estaban cerrando y no me los quisieron vender una pena como se nota que no era la dueña, sino una empleada la que había ahí
